jueves, 29 de diciembre de 2011

Recomiendo leer: El club Dumas de Arturo Pérez-Reverte

      Me lo recomendó mi amiga Marlene. Había visto la película de Roman Polanski La novena puerta y se había fijado en que estaba basada en un libro de Arturo Pérez-Reverte. ¿Lo conoces?, me preguntó. Yo tampoco conocía el libro, ni siquiera había visto la película en ese entonces. Me había comprado La sombra del águila  (de 1993) y tenía bien presente su frase “Yo he visto ancianos llorar en la guerra, nunca vi llorar a una anciana en la guerra. La mujer tiene una fuerza moral de la que el hombre carece…” en un reportaje para la revista argentina Lea de julio del 2000, pero no me parecía que Pérez-Reverte hubiera escrito un libro sobre temas demoníacos…

     
      Y aún ahora me parece discutible si realmente lo hizo. El club Dumas me parece más un libro sobre libros, que un libro de tema sobrenatural. Pero, claro, eso no podía colocarse en una película para la que se seleccionó justamente aquellas partes de la novela que servían al objetivo del guionista de La novena puerta. Todos sabemos lo decepcionante que puede llegar a ser una película que no está a la altura de un libro que amamos, así que no se sorprendan si hay muchas discrepancias entre la obra escrita y su interpretación fílmica.


      El club Dumas tiene el comienzo propio de una novela criminal: un asesinato y una investigación que surge a partir de ese asesinato. El protagonista, Lucas Corso, taimado, simpático y amoral, sólo reconoce un lado: el suyo. Es el antihéroe perfecto y está muy bien personificado en la película, pero mientras Depp deja entrever un lado falsamente debilucho en su personaje, en la novela el sólido cinismo de Corso es perpetuo.

    No hay héroes en El Club Dumas. Esa ambigüedad entre buenos y malos es uno de los atractivos de la novela. Lucas Corso, el protagonista, encuentra por encargo libros raros y caros. Un importante librero, Varo Borja, lo contrata para realizar una doble tarea: autentificar un manuscrito de Los tres mosqueteros y un ejemplar de un enigmático libro que fue quemado junto con su autor en 1667, el Libro de las Nueve Puertas del Reino de las Sombras, un manual para invocar al diablo. Corso debe encontrar los restantes ejemplares del Libro de las Nueve Puertas, y comprobar la autenticidad del texto y de las nueve láminas que lo acompañan. Estos diseños, perfectamente reproducidos en la novela, se asemejan a cartas de tarot y resultan más importantes que el libro mismo porque se sospecha que fueron hechas por el mismísimo Lúcifer y constituyen la guía segura para invocar al diablo. De ahí la importancia de comprobar su autenticidad. Corso se toma tan en serio el encargo, que parece poner un interés propio en el caso y los cuerpos se amontonan a medida que avanza la investigación. Referencias ficticias (como el Tratado del Arte de la Esgrima de Astarloa, clara referencia a su novela de  El maestro de esgrima de 1988, una enorme guiñada a los fieles lectores de Pérez-Reverte) se mezclan con referencias de la literatura clásica.




      Hay mucho material en la web para leer sobre este escritor y periodista que hace parte de la Real Academia Española desde 2003, algo de lo cual puede accederse a través de su página: http://www.perezreverte.com/. Pero también hay muchas novelas del autor circulando en las librerías. A atreverse, entonces, si aún no lo conocen.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Sobre Aurora boreal de Åsa Larsson

      Hasta la mitad del libro no se parece a la primera novela que leí de Åsa Larsson. Como si fuera el primer libro que escribe (y así es, fue publicado en 2003), como si le costara encontrar su voz, su propio ritmo. Pero cuando lo encuentra… allí está la autora de la que me enamoré perdidamente al leer Sangre derramada (su segunda novela, de 2004). No pensé que una novela negra pudiera ser hermosa o hasta poética hasta que leí a Larsson que, dicho sea de paso, no tiene ningún parentesco con el otro Larsson, Stieg, el de Los hombres que no amaban a las mujeres. Ningún parentesco ni nada en común, solamente la nacionalidad y el tema sobre el que escriben: ambos son autores actuales de novela negra.

      Nacida en Uppsala en 1966 y al igual que la protagonista de sus novelas, Åsa Larsson estudió leyes y trabajó como abogada tributaria. Los personajes de sus novelas son interesantes sin ser agradables, las descripciones del paisaje te hacen querer dar un paseo por Kiruna (el pueblo minero donde ambienta sus novelas ubicado cerca del Círculo Polar Ártico), la trama es original sin salirse de las reglas del género y el estilo, propio de la autora.


      En Aurora boreal un predicador protestante, Víktor Strandgard,  fue brutalmente asesinado en su iglesia y dos policías, con la ayuda de la abogada fiscal Rebecca Martinsson, buscan hacer que las personas implicadas descubran sus secretos para poder encontrar al asesino. El punto fuerte de esta novela son los personajes femeninos: Anna-María Mella, una policía embarazada, Sanna Strandgard, hermana del predicador asesinado que llama a Rebecca para que la ayude, y la protagonista, Rebecca Martinsson, que acude renuente en auxilio de su amiga de infancia y resuelve el asesinato de un modo nada convencional…


      Aurora boreal vale la pena si te sucede lo que a mí: leí primero Sangre derramada, me enamoré de la autora y quise saber qué sucedió anteriormente con la protagonista, más madura y reconcentrada en la segunda novela. Pero si quieres comenzar con el pie derecho, no pierdes nada si decides saltarte esta primera y seguir con la siguiente. Cada obra es un todo en sí, tiene un ambiente propio (aunque el lugar geográfico sea el mismo) y la protagonista evoluciona de una entrega a la otra. Así que… a atreverse. Por mi parte, voy en pos de la tercera que ya vi en una librería de Melo: La senda oscura.


    Los suecos le dieron a Åsa Larsson el Premio a la Mejor Primera Novela Negra por este libro y la convirtieron en película en el año 2007: http://www.youtube.com/watch?v=v4Wp5NipLRY

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Recomiendo leer: Poemas impuros de Nuria Amat


    Encontré Poemas impuros en una librería de mi ciudad, o sea, del único modo que puede encontrarse un buen libro aquí: por pura casualidad. Como lo hago a veces, anoté en la primera página en blanco la razón que me llevó a comprarlo: “por la promesa de la palabra ‘impuros’”. Lo había visto, volví y lo busqué: nadie lo había descubierto aún. Es mío. Y este es un sentimiento que sólo un lector adicto puede comprender.



    De acuerdo a su página web, Nuria Amat nació en Barcelona. Así, sin ninguna fecha. Investigando es posible determinar un año: 1950, no oficial. Es escritora, pero no una escritora así nomás… ha escrito novelas, poesía, teatro, ensayo y artículos periodísticos. Deslindó los géneros literarios antes de que este tema estuviera tan de moda.

    De este libro rescato la crudeza de las expresiones que utiliza para referirse al paso del tiempo por la vida: “Resiste cuerpo, /caracol nocturno, /reducido a larva, /Armario sin negrura, /poema roto, /coito fracasado /con la vida”; y la sencillez de las que utiliza para referirse al amor y el desamor: “Lo que toco se deshace, /lo que amo se estropea. /Mi conflicto con la vida /es tan agudo /que, entre amar y matar, /apenas veo la diferencia /de una letra”; a las huellas del tiempo en nuestro cuerpo: “Me estoy haciendo vieja, / ya no bailo, /no maldigo a los vecinos,…”.

    En su página web,http://www.nuriaamat.com/biblioteca/, es posible ver fotos de su biblioteca y leer algunas páginas de su libro Escribir y callar:

 Mi biblioteca es oscura. Más cripta de iglesia parece que almacén de libros. Una tumba de obras literarias. Un mausoleo destinado a la lectura. Un monumento vivo. Al fin y al cabo, los libros siguen alimentando mi existencia. ¿Ahora menos? Ahora cuando tal vez ya me he convertido en libro…”





martes, 20 de diciembre de 2011

Recomiendo leer: Qliphoth** de Pedro Ángel Palou


    ¿Alguien más ha notado que cada vez que un libro ostenta en la contratapa la promesa de la palabra erótico resulta ser una decepción al leerlo? ¿O es superficial, o vulgar o simplemente ileíble? Pues les aseguro que no les decepcionará esta novela corta de Pedro Ángel Palou*. Primero, porque la promesa se concreta, y segundo, porque lo hace enmarcado de una prosa exacta, llena de dramatismo y poesía. Y entonces olvidas la razón por la que habías comprado el libro en primera instancia, y pasas a deleitarte con su prosa.
    El protagonista, Andrés, ha perdido a su amada Mónica, y busca recrearla a través de las palabras: recuerda cuándo la conoció, la primera vez que hicieron el amor, los detalles de su cuerpo, el misterio de compartir con el otro el momento máximo de intimidad al que pueden aspirar un hombre y una mujer y, a la vez, sentirse tan lejos del otro… En esos momentos, la escritura le sirve “…como lugar de encuentro, como verdad última, como acercamiento. Escribir para ser, para evitar la soledad y compartir el mundo”. Pero esta acción no le permite recuperar a su amada, no totalmente... o tal vez sea la única forma de recuperarla... aunque sea a través de la plasmación de sus recuerdos, aunque sea de forma incompleta, aunque ese inevitable intento le cause más dolor...



  *Escritor mexicano nacido en Puebla en el año 1966. Es autor de novelas, ensayos literarios, crónicas históricas y ganador de varios premios.
      **Del hebreo, inversión del árbol de la vida: http://es.wikipedia.org/wiki/Qlifot

lunes, 19 de diciembre de 2011

Recomiendo leer: Yo me he llevado tu queso de Darrel Bristow-Bovey



    Este antilibro de autoayuda es un interesante ensayo corto de humor recomendable solamente para los que reconocen sentir cierta irritación cuando se ven rodeados del floreciente mercado de libros de autoayuda, y deben controlar un comentario mordaz cada vez que reconocen en boca de un alma generosa algún consejo consolador destilado de una de estas obras. Si eres un fanático de este tipo de lectura, mejor no leerlo, puede resultarte algo… ofensivo… Pero si quieres disfrutar un rato con algo, cada vez más raro, de humor inteligente sin gastar demasiado tu cerebro, dale una segunda mirada si lo ves en el escaparate de alguna librería. Aunque la 1ª. edición se publicó en 2001 (la mía es de 2005), sigue teniendo plena vigencia y seguro que les será imposible no reconocer alguno de los anticonsejos manejados con solvencia por Bristow-Bovey*. Ah, y siempre puedes descubrir un buen uso para las páginas en blanco que el autor deja al final del libro para libre uso de los lectores. Después de todo, ya las pagaste…  



* Periodista y escritor de reportajes viajeros de origen surafricano.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Sobre Tumba a la vista de Charlaine Harris


       Tumba a la vista (Grave Sighs) es el primer libro de la última serie escrita por Charlaine Harris, escritora norteamericana nacida en 1951 y autora de la serie de novelas Southern Vampire Mysteries en la que se basa la serie de televisión True Blood. La protagonista, Harper Connelly llega al pueblo acompañada de su hermano, Tolliver Lang. Ha sido contratada para investigar la desaparición de la novia del hijo de una rica viuda, Sybil Teague. El muchacho fue encontrado muerto y  se sospecha que asesinó a su novia y luego se suicidó, por lo que su madre quiere saber la verdad. Pero Harper y Tolliver no son una pareja de detectives comunes: la muchacha de veinticuatro años tiene un don, una especie de “olfato” especial (ella lo describe como un zumbido a medida que se acerca al cuerpo) para encontrar cadáveres y para "ver" lo que les causó la muerte.  
    Hasta aquí, la clásica trama de este tipo de novelas criminales, pero con el agregado del elemento sobrenatural y de algunos detalles que vuelven a la novela interesante: la relación de dependencia entre los hermanos, la forma como Harper ve el mundo desde su extraño don (desarrollado luego de haber sobrevivido a la caída de un rayo), las relaciones que los hermanos establecen con  las parejas sexuales que conocen en la ciudad, sus recuerdos de infancia  (son hermanastros, en realidad, criados por padres alcohólicos y fruto de sus matrimonios anteriores). Pero el lector no corre el riesgo de perder el hilo de la trama y, a diferencia de Muerto hasta el anochecer, esta novela carece de las descripciones detalladas y entusiastas sobre las aventuras sexuales de su protagonista. Si esto le agrega o le quita interés es algo que cada lector debe decidir por sí mismo.

    A mí me resultó agradable de leer y entretenida, aunque adolece del defecto de las novelas de su género que están tan de moda: su superficialidad. Para llevársela a la playa sin demasiadas expectativas y disfrutarla sin temor a olvidarla luego.

Recomendación: biblioteca virtual El Libro Total

    Recomiendo darle una mirada a esta página: http://www.ellibrototal.com/ltotal/.
  Hermosa y completísima.

viernes, 9 de diciembre de 2011

Sobre Muerto hasta el Anochecer de Charlaine Harris


Confieso que luego de encontrarme con tantas adolescentes suspirantes, ingenuas y con las hormonas sulfuradas creí que estaba volviendo a la época en que mi abuela dejaba quemar la comida en la olla por estar leyendo novelas de Corín Tellado*, donde todas las historias de amor tienen final feliz, la protagonista es virgen y, como me recordó una amiga hace poco en una cómica hipérbole: “el beso se da al final”. Por eso fue tan agradable leer a Charlaine Harris con su extraña protagonista de nombre que suena a actriz de película porno, la camarera telépata Sookie Stackhouse, y el relato de sus experiencias sexuales. Como otras de su género (Crepúsculo de Stephenie Meyer, Ciudad de Huesos de Cassandra Clare, Fallen de Lauren Kate), está narrada en primera persona desde el punto de vista de la protagonista, que tiene la pizca necesaria de inteligencia para enamorarse del único chico guapo y con poderes sobrenaturales que, para suerte (o milagro inexplicable) de la protagonista, también cae rendido a sus pies. A diferencia de novelas similares (Muerto hasta el anochecer fue publicado en 2001, Crepúsculo en el 2005 y Fallen en el 2009, por ejemplo), Sookie es una mujer adulta (aunque para no huir de las reglas del género también virgen) que se reconoce poco inteligente y con un don que cataloga como incapacidad. Total que no sabes si estás leyendo una novela romántica, de tema policial o sobrenatural. Pero creo que esa es la idea actual, ¿no? Abarcar un número mayor de lectores en una época en la que todo se fabrica en serie, hasta las novelas. Sorprendente no es que Charlaine Harris haya escrito once libros de su serie sobre Sookie,su serie más exitosa, sino que haya más personas escribiendo sobre los mismos temas y que haya un grupo aún más extenso de lectores dispuesto a leerlas. O sea que, más que con necesidad de hermosas historias de amor, estamos necesitando sentirnos especiales y enamorarnos de personas que nos retribuyan y que tengan características aún más especiales…, o sea, que aún necesitamos y mucho, ejercer nuestro derecho a soñar a través de los sueños que tenemos en común con los demás. ¿En qué nos distinguimos, entonces, las mujeres (jóvenes o no tanto) actuales de nuestras abuelas?


Muerto hasta el anochecer recibió una adaptación en la serie de televisión True Blood (Sangre Verdadera) para HBO creada por Allan Ball y estrenada en 2008.
* Nombre por el que es conocida María del Socorro Tellado López (1927-2009), la escritora española de novelas románticas más leída después de Miguel de Cervantes.

Sobre Fallen de Lauren Kate


    No tengo muy claro en qué momento me propuse comenzar a leer cuánto libro me caía en manos que perteneciera a la mezcla actual de novela romántica juvenil y temas sobrenaturales que incluyen vampirismo, lobisones, ángeles caídos, magos, dragones, semidioses de la mitología griega y romana y cuánto más pueda se les pueda ocurrir incluir a estos autores que pueda rendir una trama con enganche y garantizar buenas ventas. Tal vez haya comenzado en el momento en que leí Harry Potter y experimenté en carne propia ese afán de ir comprándome desesperadamente cada nuevo tomo que aparecía, o, más recientemente, me maravillé con su sucesor, Percy Jackson. Sólo quería mantenerme al tanto de lo que se estaba creando en el mundo actualmente en el área la narrativa de ficción y fantasía y me encontré con este nuevo mercado editorial dirigido a un público joven que sí está leyendo, aunque sea discutible el valor y la calidad de lo que está leyendo. Lauren Kate hace parte de esa última partida de autores en su mayoría norteamericanos.

   
    Publicada en  2009, Fallen es la historia de Luce, una joven de dieciséis años, que ingresa a una nueva escuela, la Sword & Cross (mezcla de internado y reformatorio), luego de un extraño accidente donde perdió a su novio. Ya en el momento de su llegada se enamora de un misterioso compañero de clase que resulta ser un ángel caído. La historia no sería tan mala si no me hubiera pasado más de la mitad del libro esperando que se volviera explícito lo que ya sabía por la carátula del libro: que Daniel y Cam, su rival en el corazón de Lucy, son, en realidad, ángeles caídos. O si Luce no fuera tan insoportablemente anodina. Lo que me lleva a preguntarme si los autores no estarán creando protagonistas tan aburridas para darle a sus jóvenes lectores una posibilidad mayor de identificarse con ellas. ¿Será una esperanza de mi parte o me estaré volviendo más ingenua con la edad? Lo más interesante: Fallen será llevada al cine pronto, pronto...

viernes, 2 de diciembre de 2011

Sobre Los Crímenes de la Luna Llena de Kit Whitfield


La xenofobia desde una mirada alternativa es la interesante propuesta de esta escritora británica que está condimentada con pizcas de ironía bien distribuidas. Recomiendo darle una mirada a esta original novela (Bareback en inglés)escrita por Kit Whitfield que, además de ser un buen ejemplo del deslinde entre los géneros en la época actual (es una novela criminal en un ambiente fantástico), está bien escrita, los personajes son sólidos y no tiene un final predecible. Lola May es una abogada humana del servicio estatal que controla la licantropía  en un mundo donde la mayoría de la población está compuesta por hombres lobo. Su tarea será resolver los asesinatos de dos de sus compañeros de trabajo en un mundo donde “no ser un licántropo es un defecto de nacimiento sumamente extraño”.

Sobre El Coleccionista de John Fowles


    Recomiendo la lectura de El Coleccionista (1963), la primera novela publicada del escritor y ensayista británico John Fowles. Es la historia del rapto y prisión de Miranda Grey narrada en su mayor parte desde el punto de vista de su raptor, Frederick Clegg. Acostumbrados a las actuales películas y series donde desfilan psicópatas y asesinos en profusión, esta novela de trama psicológica es una visión singularísima desde dentro del cerebro enfermo de uno de estos personajes. No por casualidad, Clegg es un lepidopterista, un coleccionador de mariposas, afición que da título al libro y sirve es una analogía a la prisión de Amanda Grey y las víctimas que, se sugiere, vendrán después de ella. Es una obra exquisita aunque no apta para estómagos delicados, por la descripción obsesiva de los detalles del rapto (como la elección de la víctima, vigilancia hasta la captura), de la prisión, agonía y muerte de la joven. Escrita en primera persona incluso en la segunda parte, una transcripción del diario de Miranda Grey que encuentra su raptor después de su fallecimiento, en ningún momento permite la fuga del lector de este ambiente enfermizo y acuciante de la mente de los personajes. Lecturas posteriores parecerán superficiales a los amantes del tema después de la lectura de El Coleccionista.
    Más información en la página web oficial del autor:  http://www.fowlesbooks.com/novelsof.htm. El único inconveniente es que está en inglés.

martes, 29 de noviembre de 2011

Sobre El Largo Adiós de Raymond Chandler


    Acuso formalmente a Dashiell Hammett de ser el causante de que me enamorara de la novela negra. Y cuando me refiero a la novela negra no estoy hablando de la novela de detectives al estilo Agatha Christie donde se plantea un enigma que debe dilucidarse, ni de las actuales mezclas de ciencia forense y a-quién- mato- de- forma- más-horrible al estilo Patricia Cornwell, sino de la verdadera novela negra que deja de ser lectura fácil de bestseller cuando el autor es alguno de estos dos escritores estadounidenses Hammet  (considerado el padre de la novela negra) y Raymond Chandler. De Hamett sigo enamorada desde que leí Cosecha Roja y El Halcón Maltés en mi adolescencia. Chandler, en cambio es mi pasión de adulta. Creí encontrar un tercero cuando leí de Ciudad de Huesos e Hielo Negro de Michael Connelly  pero no toda su producción tiene la calidad de las dos obras mencionadas.


    El Largo Adiós (1953), obra de madurez de Raymond Chandler (1888-1959), tiene una trama tan compleja que te mantiene en vilo permanentemente. Cuando crees tener la respuesta a algunos de las misteriosas conductas de sus personajes, Marlowe, detective particular y narrador  protagonista se encarga de echártelo abajo con su desconfianza cínica de las clases adineradas entre las que se mueve, sin embargo, hábilmente y una conducta de una rectitud intachable. Ver el mundo como lo ve Marlowe es un placer innegable. Nada tiene que merezca destacarse en la oficina o en la casa, nada teme perder pues vive solo, es un hombre seguro de sí mismo y de que su postura en la vida es la correcta sin necesidad de andarse justificando. Cuando quiere darle una mano a un borracho, Terry Lennox, al que ayuda y con el que simpatiza, aún después de ser acusado de asesinar a su acaudalada mujer, quieres mudarte a su departamento y ver la vida de la forma cínica pero honrada en que la ve él. Y lo haces, a través de la lectura. Es uno de esas novelas narradas de tal modo que entras en la piel, asumes la mirada del protagonista pero no ves dentro de su cerebro, porque las intenciones de Marlowe son sus acciones.   Digno de vivenciar especialmente el enfrentamiento verbal entre el detective y el policía que lo usa para detener a un importante maleante. Todo la dureza y el cinismo que destila cada uno defendiendo su punto de vista lo solucionan al final tomándose una copa juntos.






miércoles, 16 de noviembre de 2011

Sobre La Momia o Ramsés el Maldito de Anne Rice

    Es el libro que más me ha costado leer de los que me he comprado este año y, aunque no lo compré con grandes expectativas, lo cierto es que esperaba más, mucho más de la dama oscura del horror. Había leído con anterioridad El Ladrón de Cuerpos (pesada pero que te deja un gusto acre en la boca concluida la lectura), la clásica Entrevista con el Vampiro que no me impresionó lo más mínimo, La Fiesta de Todos los Santos (novela histórica que no concluí de puro aburrimiento), Taltos y La Hora de las Brujas, la única digna de mencionar y que recomiendo a quien quiera ingresar en el mundo de la autora por la puerta grande. Es imposible leerla y permanecer incólume. En cambio, La Momia, parece un accidente de esos que provocan contratos que exigen que los escritores de bestsellers escriban un libro nuevo por año, al menos.
    Desde el inicio de la lectura noté la poca profundidad de los personajes y la ligereza de los diálogos, luego noté el ritmo de la trama, al estilo las novelitas Bianca y Sabrina que aún se venden por ahí y que leí mucho en mi adolescencia a falta de plata y posibilidades de acceder a algo mejor. Cuando allá por la mitad del libro descubres que la protagonista va a tener su primera noche de amor con Ramsés, y, oh, sorpresa, resulta que es virgen, pensé qué hago con el libro, lo tiro a la basura o lo uso como papel higiénico... Pero la valiente e infatigable lectora que hay en mí contraargumentó: tiene que mejorar en algún momento y comenzar el relato de horror que promete el argumento de la contratapa. Un poquito más de esfuerzo, un poquito más... y mejoró... algo... allá por la página 342 (de 565), cuando Ramsés, el inmortal, no conforme con su amante humana, la delicada y de buena cuna Julie, decide despertar la momia de su querida Cleopatra, el amor de su vida que nunca olvidó. Y todo se derrumba cuando la momia resuscitada comienza a matar a todo ser humano que la molesta de alguna manera, tal como uno revienta las moscas que se le posan de vez en cuando... Aún así, te quedas esperando hasta el final, ese tono de horror que prevalecerá a través de los años y puedes evocar cada vez que ves la tapa del libro, cuando ya has olvidado la trama de la historia... Julie no adquiere nunca la personalidad que justifique que el bello, poderoso, e inmortal Ramsés se enamore tan apasionadamente de ella, ni Ramsés es  tan inteligente después de todo pues no puede controlar sus pasiones. Y nos sobra la bella Cleopatra de cerebro enfermo y corazón destruido, con más personalidad que todos los demás. Termino lectura y no pienso volver a tocar el libro. Una de tantas novelas archivadas por si algún día un lector extraño se apiada de ella y puede ver en sus páginas lo que yo no vi. 

domingo, 13 de noviembre de 2011

Sobre la novela Pegasus de Kate O'Hearn

    Mi última compra (era barato) resultó decepcionante pese a su hermosa tapa. Uno de tantos libros sobre fantasía urbana para jóvenes que están de moda hoy en día. Emily, una niña de trece años que perdió hace poco tiempo a su madre y vive con su padre, se encuentra un día con un hermoso pegaso (el caballo alado de la mitología griega-romana) que ha caído herido en la terraza de su edificio. Y esa es la disculpa que usa Kate O'Hearn para el desfile de personajes de la mitología (insiste la autora) romana, que incidentalmente vienen a dar a nuestro mundo luego de que el Olimpo es atacado por un ejército de seres monstruosos, los nirads, y el fuego divino fue apagado. La historia es floja, la redacción más floja aún y los personajes insípidos, sin personalidad propia, como pegaditos con saliva. La autora es una canadiense residente en Nueva York que podía haberse dedicado a escribir novelas rosa y eligió la fantasía juvenil porque es lo que vende, una pena...
    Me quedo con la tapa, aunque al menos la letra era grande, jaja. A disposición para quién le interese leerlo... o quedarse con él así ahorro espacio en las estanterías de mi biblioteca... Un abrazo grande.

¡ Bienvenidos!

    Espacio destinado a los amantes de los libros y 'lectómanos' de todos los tipos que quieran compartir sus lecturas, recomendaciones, comentarios y lo que más se les ocurra. Para aquellos que no pueden evitar leerse hasta los rótulos de las botellas de Coca Cola y piensan que en el futuro pueden tener que mudarse de casa para dejarle espacio a los libros... Sean todos bienvenidos.

Sobre la revista Vértigo, La Torre Oscura y Anjos Rebeldes de J. Modesto, Nelson Magrini y otros

    Este fin de semana me prestaron dos revistas: la edición n° 22 de la Vértigo publicada por la Panini Comic brasilera y el tomo 5 de 6 de La Torre Oscura en versión cómic (llamadas también novelas gráficas) dirigida por Stephen King e ilustrada por Jae Lee y Richard Isanove. Por último, y sabiendo que mi interés se ha centrado en estos últimos tiempos sobre las figuras de ángeles, mi amigo me trajo una selección de cuentos titulada “Anjos Rebeldes” de renombrados autores brasileros de la Literatura Fantástica, como Regina Drummond, Nazarethe Fonseca, J. Modesto, Nelson Magrini, entre otros, que, confieso, espero conocer luego de esta lectura.
Por si alguien nunca escuchó hablar de la revista Vértigo, se trata de una revista de cómic destinada a un público adulto que publica series como Hellblazer (que inspiró la película Constantine con Keanu Reeves), Vampiro Americano con la colaboración de Sthephen King (bastante floja, la verdad) y la nueva serie, Joe, o Bárbaro, impecablemente dibujada por el ilustrador Sean Murphy y con guión de Grant Morrison. Esta última, que recién comienza, cuenta la historia de un adolescente huérfano de padre, que vive con la madre y un pequeño problema: diabetes tipo I. Un día, Joe tiene una crisis de hipoglucemia, sufre alucinaciones y crea un nuevo mundo, el mundo de Joe, perdido entre la realidad y los límites de su imaginación. El primer capítulo no me impresionó demasiado pero veo que el segundo, al menos, está magníficamente dibujado… A esperar más, entonces.
     Las ediciones en versión cómic de La Torre Oscura traen como perlas al final de cada tomo, versiones originales de los dibujos a lápiz hechos por Jae Lee. Los capítulos son cortos pero el arte del ilustrador sumado al magnífico trabajo del colorista Richard Isanove lo compensan. Para quien no lo sabe, La Torre Oscura es una serie de libros escritos por King e inspirados en el poema narrativo del escritor inglés Richard Browning, Child Roland a la Torre Oscura llegó, entre los años de 1982 y 2004. Siete tomos en total que Stephen King considera su obra maestra. La serie cuenta qué le sucede al protagonista, el joven pistolero Ronald Deschain, cuando vuelve a su tierra natal, Gilead, acompañado de su Ka-tet y cargando a la peligrosa y maligna bola de cristal conocida como Toronja de Merlín.
     Para entretenerme. Les cuento qué tal me va a medida que los vaya leyendo. Sigo fiel a mi lema: a libro prestado no le se mira la cantidad de páginas… o el autor…, je. Un abrazo grande.