viernes, 9 de diciembre de 2011

Sobre Fallen de Lauren Kate


    No tengo muy claro en qué momento me propuse comenzar a leer cuánto libro me caía en manos que perteneciera a la mezcla actual de novela romántica juvenil y temas sobrenaturales que incluyen vampirismo, lobisones, ángeles caídos, magos, dragones, semidioses de la mitología griega y romana y cuánto más pueda se les pueda ocurrir incluir a estos autores que pueda rendir una trama con enganche y garantizar buenas ventas. Tal vez haya comenzado en el momento en que leí Harry Potter y experimenté en carne propia ese afán de ir comprándome desesperadamente cada nuevo tomo que aparecía, o, más recientemente, me maravillé con su sucesor, Percy Jackson. Sólo quería mantenerme al tanto de lo que se estaba creando en el mundo actualmente en el área la narrativa de ficción y fantasía y me encontré con este nuevo mercado editorial dirigido a un público joven que sí está leyendo, aunque sea discutible el valor y la calidad de lo que está leyendo. Lauren Kate hace parte de esa última partida de autores en su mayoría norteamericanos.

   
    Publicada en  2009, Fallen es la historia de Luce, una joven de dieciséis años, que ingresa a una nueva escuela, la Sword & Cross (mezcla de internado y reformatorio), luego de un extraño accidente donde perdió a su novio. Ya en el momento de su llegada se enamora de un misterioso compañero de clase que resulta ser un ángel caído. La historia no sería tan mala si no me hubiera pasado más de la mitad del libro esperando que se volviera explícito lo que ya sabía por la carátula del libro: que Daniel y Cam, su rival en el corazón de Lucy, son, en realidad, ángeles caídos. O si Luce no fuera tan insoportablemente anodina. Lo que me lleva a preguntarme si los autores no estarán creando protagonistas tan aburridas para darle a sus jóvenes lectores una posibilidad mayor de identificarse con ellas. ¿Será una esperanza de mi parte o me estaré volviendo más ingenua con la edad? Lo más interesante: Fallen será llevada al cine pronto, pronto...

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